El uso adecuado de colirios o lágrimas artificiales es fundamental para que el tratamiento sea efectivo y seguro. Una técnica incorrecta puede reducir la eficacia del medicamento, favorecer infecciones o provocar desperdicio. Aprender a aplicarlas correctamente es un hábito clave para proteger su salud ocular.
1. Lávese las manos antes de comenzar
Antes de tocar el frasco o acercarse a sus ojos, lave bien sus manos con agua y jabón. Esto previene la entrada de bacterias y minimiza el riesgo de infecciones.
2. Revise las instrucciones del medicamento
Lea la etiqueta para conocer la dosis, frecuencia y condiciones de almacenamiento. Algunos colirios deben agitarse antes de usarlos, mientras que otros no.
3. Adopte una posición cómoda
Puede sentarse con la cabeza ligeramente inclinada hacia atrás o recostarse. Si se aplica las gotas usted mismo, use un espejo para mayor precisión.
4. Aplique la gota correctamente
- Sujete el frasco con una mano, manteniéndolo por encima del ojo sin tocar pestañas, párpado o superficie ocular.
- Con la otra mano, tire suavemente del párpado inferior hacia abajo para formar un pequeño saco.
- Deje caer una gota en ese espacio, evitando que el frasco toque el ojo.
5. Presione el lagrimal
Después de aplicar la gota, cierre los ojos suavemente y presione con un dedo el ángulo interno (junto a la nariz) durante 1 minuto. Esto ayuda a que el medicamento actúe localmente y no se drene hacia la garganta.
6. Espere entre gotas si usa más de un medicamento
Si debe aplicarse más de un tipo de colirio, espere al menos 5 minutos entre uno y otro para que cada uno actúe correctamente.
7. Consejos para evitar errores comunes
- No comparta sus colirios con otras personas.
- No utilice el medicamento después de su fecha de caducidad.
- Si usa lentes de contacto, retírelos antes de la aplicación, salvo que su oftalmólogo indique lo contrario.
- Evite tocar la punta del frasco con los dedos u otras superficies.
8. Cuándo consultar al especialista
Si presenta enrojecimiento, dolor, visión borrosa persistente o cualquier reacción extraña después de aplicar las gotas, acuda a su oftalmólogo de confianza. En Oftalmología Salgado encontrará orientación personalizada para su tratamiento ocular.
Conclusión
Aplicar correctamente las gotas oftálmicas garantiza que el tratamiento cumpla su función, previene complicaciones y protege su salud visual. Convertir estos pasos en hábito le permitirá cuidar sus ojos de forma sencilla y efectiva.
